El Día de la Tradición en Argentina se celebra el 10 de noviembre en homenaje al escritor José Hernández, autor del Martín Fierro, una obra cumbre de la literatura que relata la vida del gaucho, sus costumbres y códigos de honor. Esta celebración fue oficializada en 1939 con la aprobación de la Ley N.º 4756, que estableció esta fecha en conmemoración del natalicio de Hernández. Sin embargo, fue más tarde, con la Ley Nacional N.° 21.154 de 1975, cuando ya de forma definitiva se consagró aquella fecha conmemorativa para todo el territorio argentino.
Cada 10 de noviembre, honramos la rica herencia cultural del país, particularmente a la figura del gaucho, símbolo de libertad y coraje. En esta ocasión, destacamos a algunos de los autores que, a través de sus obras, inmortalizaron la vida gauchesca y contribuyeron a la construcción de la identidad argentina.
José Hernández y el “Martín Fierro”
El nombre de José Hernández está indisolublemente ligado a la cultura gauchesca. Su poema épico Martín Fierro (1872) se considera la obra cumbre del género. A través de la voz de Fierro, Hernández defendió a los gauchos, denunciando las injusticias que sufrían en las zonas rurales y reivindicando su estilo de vida. Martín Fierro no solo es un pilar de la literatura argentina, sino también un reflejo de los valores de libertad, honor y resistencia.
Ricardo Güiraldes y “Don Segundo Sombra”
Otro autor imprescindible es Ricardo Güiraldes, quien en su novela Don Segundo Sombra (1926) ofreció una visión poética y nostálgica de la vida rural. La obra se centra en la relación entre un joven huérfano y un gaucho experimentado, Don Segundo, que lo introduce en las costumbres y el modo de vida tradicional. Güiraldes presenta al gaucho como una figura noble y sabia, con un profundo respeto por la naturaleza y las tradiciones, aportando una mirada más intimista y reflexiva al género.
Leopoldo Lugones y El payador
Leopoldo Lugones, en su obra El payador (1916), ofreció una serie de conferencias que exaltaban la figura del payador, un personaje clave en la vida rural argentina. Lugones consideró al payador como el portavoz de los sentimientos populares, y dedicó un gran elogio al Martín Fierro, al que calificó como el poema nacional por excelencia. En El payador, Lugones no solo destacó la importancia de la obra de José Hernández, sino también la tradición oral de los cantos gauchescos y su papel en la formación de la identidad cultural argentina.
Florencio Molina Campos: el arte que narra al gaucho
El arte de Florencio Molina Campos también merece un lugar destacado en esta celebración. Sus ilustraciones y pinturas capturan con humor y detalle la vida cotidiana del gaucho, desde las labores rurales hasta las fiestas populares. Molina Campos no solo retrató la figura del gaucho, sino que lo hizo accesible para el gran público, especialmente a través de sus famosas almanacas Alpargatas.
Inodoro Pereyra: el gaucho moderno de Fontanarrosa
En una versión más contemporánea, Roberto Fontanarrosa, a través de su personaje Inodoro Pereyra, ofreció una mirada humorística pero profundamente respetuosa de la figura del gaucho. Inodoro es un gaucho “moderno”, con reflexiones desopilantes pero cargadas de sabiduría popular. Con su fiel perro Mendieta, Inodoro recorre un paisaje rural que se mezcla con la ironía y las problemáticas actuales, manteniendo siempre el espíritu del gaucho como emblema de la libertad y la independencia.
El legado gauchesco en la cultura argentina
Estos autores, desde diferentes perspectivas y estilos, han logrado retratar y preservar la esencia del gaucho en la cultura argentina. El gaucho, como figura emblemática de la libertad y la conexión con la tierra, sigue vivo en nuestra memoria gracias a sus historias, reflexiones y, sobre todo, a las tradiciones que seguimos celebrando. El Día de la Tradición nos invita a reencontrarnos con nuestras raíces, honrando a quienes, con sus palabras y sus obras, nos ayudaron a definir nuestra identidad nacional.